sábado, 19 de septiembre de 2015

El Héroe de Infiernos


Había sido una tarea ardua. Un trabajo constante. Una conquista desmedida. 
Había logrado curar males, crear nuevos círculos y modus-operandi.
Había convertido los demonios en seres dominables, educados y controlables.
Había conquistado tierras con paciencia, un poco de amor y entrega. 
No había quién detuviera su afán por sembrar en este corazón partido en miles de trillones de pedazos.

Y pudo. Y pudo. 
Atravesó con mucho afán miles de heridas, cortas, largas y profundas. 
Pero, nadie en este mundo atraviesa infiernos, sin llevarse de él, algo.
Nadie es inmune a tocar los techos, mares y fondos del infierno mismo, sin llevarse por dentro el toque desgarrador del odio, maldad, y egoísmo de sus techos y muros.

La única forma de poder entrar a salvar un alma del infierno, es con forros de amor, sin protección, sin armaduras, sin espada. Porque entre más sincera es la conquista, más penetran las semillas para el ser perdido.

Sí, era un ser perdido.
Luego de sacar a un muerto en vida. 
Él, logró pintarlo con colores. Enseñarle nuevamente lo que eran las praderas, los jardines. No miento, hay una gama de colores diferentes. Nada era igual, nada se sentía igual, pero fue, diferente.

Con el paso del tiempo, al fin, abrió los ojos, su cuerpo abstracto, tomó forma y color. Sonreía. Sonreía, no solo a la vida. Sonreía de tanto amor, al ver, su héroe, por fín! 

Pero el infierno comenzó a arder, y con ello ardieron las cicatrices de cada vez que intentó salvarme.  Y de pronto, comenzó a oscurecer su rostro. Y sentí miedo.
Comenzó a dejar de sembrar. Esculpió tanto en mí, que ahora, se volvió oscuro.
Cada retoque que hizo a mi alma, cada guerra que batalló, el me obligaba a ver las escenas en las que me conquistaba para salir del infierno. 
Y de pronto, ,mi color, mi vida, se fue volviendo abstracta. 

El gran héroe, se quedo sin color. 
Le repetí varias veces, "!perdón!", a lo que no tenía por qué ser perdonado. 
Pues un héroe nace, de acciones altruistas, y él sólo estaba lleno de rencor. 

Un gran torbellino, nos llevó a los dos. De pronto, nos convertimos solo en aire. A veces huele a infierno, y aveces huele a luz. En este torbellino, le rogué, le supliqué que me dejara curar sus heridas, pero simplemente se compactó tan fuerte y tan cerrado, que sólo se convirtió en un Toberbellino Vicioso, en donde yo, estoy eternamente a pagar haber sido sacada del infierno, y él con una meta vacía, que ya no logra ni ver, en qué semilla se quedó su ímpetu deseo, de sacarme de un infierno.

Ahora, yo me encuentro, en medio de luz e infierno. 
Y él, él sólo irá desvaneciéndose de mí, algún día, en que yo encuentre la forma en cómo dejar de mirarlo como un Héroe.









jueves, 30 de julio de 2015

Soledad


Quizás no fue mi intención.
Un ser espectacular, me enseñó a que mi máscara no debe estar siempre. Que debo mostrar quien soy, no solo la que se cubre de risas para alegrar a los demás, aún cuando me siento desconsoladamente triste.

La gente me critica, porque siempre hablo de mi mundo. Dicen que mi mundo es el mundo en que todos viven. Y eso: no es cierto.

No es que no cometa errores. Pero siento una energía impresionante siempre por mejorar. Y eso, hace que mi mundo sea especial. Al menos eso creo cuando converso con mi soledad.

Esa que se sienta conmigo, y me ayuda a abrirme, aunque todos piensen que no me cuesta. Esa que me acompaña cuando voy camino al trabajo. Esa que me acompaña al baño. Esa con quien me levanto cada mañana. Esa...que me escucha llorar. Esa que sabe cuando algo me ha herido después que cuento un chiste.

A esta soledad que vive en mí. Que me pregunta por las personas que han pasado durante mi vida. A esa, le escribo hoy.

Dejame separarme de ti! Dejame para poder crecer y endurecerme. No me hagas pensar ni creer que hay algo hermoso en cada ser humano. Pues, contigo a mi lado, creo! Actúo como niña cuando debo ser adulta.

A todos ustedes, que viven vidas paralelas como yo. Yo también existo. También estoy aquí.


Me hubiese gustado conocerte, cuando estaba sola, y no cuando soledad nunca se separara de mí.

Pero debo admitirte, soledad, que me ayudaste a pasar noches sola, pero nunca en soledad, porque estabas allí, viéndome llorar cada noche. Y por eso, siempre te estaré agradecida. Solo tú, conoces mis huellas, pisadas, y cemento de mi alma.




martes, 19 de mayo de 2015

---Eutanasia de Amor---

"Eutanasia (del griego euthanasía, que significa ‘buena muerte’) es la acción u omisión que acelera la muerte de un paciente desahuciado, con o sin su consentimiento (como es el caso del coma), con la intención de evitar sufrimiento y dolor. La eutanasia está asociada al final de la vida sin sufrimiento." Wikipedia.


Dicen que cuando uno se enamora, el ser humano brilla en su esplendor, y sus cualidades se triplican, y el amor lo transforma en un ser maravilloso, a imagen y semejanza del creador.

Dicen que se conoce el verdadero ser humano, al momento que ese amor desaparece. Y aparece quien realmente es. Lo que lleva dentro. 

Creé este blog hace 5 años con un sólo propósito. Ese propósito se fue...y quedé yo. 

El corazón es un órgano muy endeble. El cerebro puede dejar de funcionar, más el corazón puede seguir latiendo. Pero un cerebro no puede funcionar sin el corazón.

Hace años me hice una promesa. La promesa de jamás ser como aquellos adultos del que habla mi pequeño Principito. Al seguir creciendo, me doy cuenta que es algo inevitable. Es inevitable, tan inevitable como respirar, aún sabiendo que estás muerto. 

Muerto, como millones de personas que caminan entre nosotros con tantas cruces. Perder un amor. Perder familia, perder amigos. Perder Fe. 

Vuelvo a mi barquito, con nubes dispuestas a destruirme. Vuelvo, alzando la vela lentamente, como si al llegar al horizonte, caeré por que la tierra es plana. Como si, no existiesen más puertos. Como si no existiesen más faros. Trato de recordar, cómo llegué aquí. Y trato de recordar cómo creí en una promesa sin futuro. 

Siempre he pensado que el amor vale la pena, cualquier herida, sufrimiento. Y sí, lo merece. Pero, hay seres humanos como yo, que son tan endebles, que siente la vida a mil, sí, a mil para el cielo como a mil para el infierno. Quizás he estado equivocada por muchos años, y sencillamente no nací para amar. Pensando tontamente que tenía un don, que en verdad perdí hace muchos años al alejarme del único espíritu que puede alimentar esa fuerza que da únicamente él. 

Hace semanas, ví como la vida arrebató algo maravilloso al amor. Y me tocó ver, ojos fuertes mezclados con dolor infinito. La infelicidad me espera, al no amar así de fuerte nunca. Pero la infelicidad no te hace doblegarte de rodillas y rogar amor. La infelicidad solo te amarga. Y la amargura protege. Protege de personas que no saben dar amor. 

El tiempo va pasando. Y llegará un poema con miles de cielos, estrellas, promesas y futuro. Y miraré ese poema, y seré ese adulto que solo ve un estúpido sombrero. Seré ese adulto, que sólo ve el sombrero. Fingiré por un tiempo, y luego sé, que de tanto fingir, comenzaré a realmente verlo. Y no me acordaré más de mí. De antes. De atrás. Del pasado. 

Pasaré de lejos por los puertos, veré y escucharé los gemidos de dolor de aquellos amados, y seguiré mi rumbo. Hasta que una buena tormenta decida que ya no dejaré más huellas. Hasta que la tormenta decida que ya es tiempo de reclamar mi alma, que sin permiso decidió vagar en el mar. 

Y cuando aquella ola venga, abriré los brazos a ese sentimiento inerte, que sólo salió a flote al verme dando vueltas en los mares profundos de este enorme vacío.

Por ello, he decidido hacer una eutanasia de amor. Una vida aun sin tener final, pero sin sufrimiento. Y para ello, he decidido: desconectarme del amor. 

Códigos

  Habías tomado la decisión de irte. Pero luego te encontraste con ese pedazo de amor que aún tenías. Y luego, decidiste que eso era suficie...