Estoy quieta. Mirando como pasas a mi lado.
Eres inquieta, juegas siempre cerca de mi hombro.
Puedo prácticamente sentir tu aleteo, soplando mi corazón.
Entre más te veo, mis ojos brillan, esperando que te poses sobre siempre sobre mí.
¡Aguarda! No te vayas. ¡Soy yo!
No me importa tu color, o tu tamaño, me importa que solamente descanses en mí.
Pero estoy inquieta y si sigo así, jamás podrás tomar una parada de tanto volar.
No quiero que te quedes, quiero que te poses sobre mis manos,
como si pudiera pretender que te quedarás allí.
Llevo semanas viéndote, viendo cómo pasas sobre mí y te pregunto:
¿Cúando será que me harás felíz?
¡Yo sé que tú lo eres! ¡No existen jaulas para ti!
Acércate y cuéntame: ¿qué tengo que hacer para que te quedes un minuto aquí?
No puedo más que advertirte: no te quedes mucho tiempo.
Domestico lo que toco. Y tu no naciste para quedarte.
Tráeme los recuerdos que tengas y déjame sentirlos todos.
En edificios, en flores, en muros, y paredes vas.
Recogiendo alegrías y tristezas en esta lejana ciudad.
Tus colores son recuerdos vívidos.
Y mis recuerdos están llenos de colores.
Tengo una canción que quiero que escuches.
Cuando vengas y te poses, suspiraré suavemente para alargar mi tiempo junto a ti.
Luego, te cantaré una canción que vengo cantando en los últimos años.
Una canción que quiero que dejes en las siguientes paradas que hagas.
Y repartas esa melodía con cada lágrima que encuentres.
¡Si, si quizás tan solo escucharan mi canción!
Quizás si escuchan mi melodía, sus tonos y letras: se repartiría todo mi amor por el mundo.
Trata de quedarte, más segundos, por favor, y quizás mis manos te den un nuevo color.
Un color vivo, suave y tierno.
Te prometo, serás la más bella entre todas.
Porque en el momento que te vayas, me terminaré de convertir en una como tú.
Y volaré, volaré contigo.
Habré dejado el amor, y me posaré en el siguiente ser, simplemente para decirle:
"Eres tú el siguiente, y a ti te llegará el amor.
Por favor, tardé mucho en llegar, volé muchas horas, hice muchas paradas en la inercia.
Y cuando me pose sobre ti, te diré: Era un destino fijo. Eras tú. Aquí estoy.
Y trata de entender: cada vez que me muevo, cambio destinos"
Y entonces: ¡Voló!